Luego de que sus cuerpos fueron encontrados este fin de semana bajo un puente, se conocieron las últimas imágenes con vida de Paloma Gallardo y Josué Salvatierra, los dos adolescentes que permanecían desaparecidos desde el jueves pasado en el distrito bonaerense de Florencio Varela.
Bajo la hipótesis de que podría tratarse de un homicidio, dado los golpes en la cabeza de las víctimas y una piedra con sangre hallada en la escena, los investigadores comenzaron a analizar el camino por el que ambos llegaron a ese lugar, el cual queda a pocos minutos caminando de sus viviendas, y así trascendieron sus últimas imágenes con vida.
Analizando las conversaciones entre los dos jóvenes, los detectives dedujeron que estos concurrían a aquel lugar para tener encuentros a solas y, a partir de testimonios e imágenes de tres cámaras de seguridad donde se los ve acercándose al predio, determinaron que «los chicos nunca fueron al gimnasio».
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En las imágenes obtenidas por Infobae se puede ver a Gallardo y Salvatierra caminando hacia el predio cerca de las 18:05 del 30 de enero. Dichas imágenes, donde se los ve pasando por la esquina de una zona residencial cerca de sus hogares, se convirtió en una evidencia clase del caso que le quedó al fiscal Hernán Bustos Rivas de la UFI N°5 de Florencio Varela.
Las hipótesis y el resultado de las autopsias: qué se sabe del caso de Paloma Gallardo y Josué Salvatierra
Los adolescentes fueron hallados muertos en el mencionado terreno descampado, en las cercanías de un puente ferroviario, con múltiples golpes en la cabeza. El robo podría ser una de las causas del doble asesinato, ya que en el lugar faltaban sus celulares, la mochila con un poco de plata de ella y una tarjeta SUBE.
El hecho de verlos ingresar juntos al descampado desterró la hipótesis de que hayan sido secuestrados o forzados a ingresar al terreno. Además, los investigadores tampoco encontraron rastros de que los jóvenes hubieran sido atados y ni que Paloma hubiera sufrido abuso sexual.
A raíz del crimen, los vecinos de la zona cortaron la ruta 36 y las vías del tren a la altura de la estación Bosques e incendiaron neumáticos a modo de reclamo. Asimismo, marcharon con carteles desde el lugar del hallazgo hasta la comisaría 4ta, donde la policía realizó un vallado para evitar disturbios.
Los detalles del caso
Fue el jueves 30 de enero cuando los padres de Salvatierra (de 14 años), quien asistía a segundo año del colegio 63, se alarmaron por la ausencia prolongada del adolescente y, ante la inquietud, realizaron la denuncia ante el 911.
Por su parte, Omar Gallardo, padre de Paloma (de 16 años), afirmó que su hija ese mismo día fue vista por última vez cuando se dirigió al gimnasio, ubicado a unas siete cuadras de la plaza, alrededor de las 18:00. Al ver que la joven no regresaba, poco después de las 21hs realizó una denuncia telefónica por medio de la línea 145.
Ambos adolescentes, quienes eran compañeros en la secundaria N°63, contaban con sus teléfonos celulares, lo que inicialmente generó esperanzas de poder rastrear sus ubicaciones. No obstante, sus restos fueron descubiertos debajo del puente en Arturo Capdevilla y Colectora Ruta 36. Paloma estaba boca abajo y Josué yacía boca arriba.
La autopsia reveló que ambos sufrieron fractura de cráneo y que la joven murió por «lesión cerebral» con «fractura de cráneo» y «traumatismo encefalocraneal grave», mientras que el chico falleció por «Hemorragia cerebral», con «fractura de cráneo» y «traumatismo encefalocraneal grave».
AS./fl