Carmen Barbieri volvió a estar en el centro de la polémica tras referirse nuevamente a su enfrentamiento con Morena Rial. Sin embargo, esta vez no solo habló de los cruces mediáticos, sino que reveló una situación preocupante que atraviesa en su domicilio y que la llevó a tomar una drástica decisión respecto a su seguridad.
En una entrevista con el cronista de LAM, Carmen comenzó respondiendo a las críticas que Morena hizo sobre su físico y edad: “Yo soy gorda. ¿Vos te creés que no me miro en el espejo? Soy gorda, sí, gordita. ¿Qué problema hay?»
«Y grande, claro que soy grande. En 51 años de trabajo, nunca le robé nada a nadie, nunca me mantuvo ningún hombre, nunca estafé, nunca mentí, nunca fui infiel”, lanzó con contundencia. La conductora también se refirió a las acusaciones que Morena hizo sobre las infidelidades de Santiago Bal, aunque dejó en claro que no le afectan.
“Nada de lo que dice me lastima, ni siquiera siento odio. Porque para sentir odio tendría que haberla querido, y nunca la quise ni la querré”, expresó sin filtro. No obstante, el punto más álgido de sus declaraciones llegó cuando reveló la inquietante situación que la llevó a reforzar su seguridad en casa.
LA DRÁSTICA DEDICIÓN DE CARMEN BARBIERI:
“Puse una cámara en la puerta de mi casa porque me tocaron el timbre dos veces ya, ayer a la madrugada. Decían ‘bajá, bajá’. Me quedé escuchando, porque digo, capaz que tocan todos los pisos, pero solo tocaban en mi piso”, relató con evidente preocupación.
La frase que dejó a todos helados fue aún más contundente: “Si me pasa algo, quiero que sepan quién fue. Yo no sospecho de nadie, pero si pegado a esto me tocan el timbre…”. Carmen no dudó en vincular indirectamente a la hija de Jorge Rial en sus dichos, ya que hace poco tiempo atrás la influencer tuvo una pelea a la salida del boliche.
“No sé por qué no está presa. Hay una justicia divina que se cumple tarde o temprano, lo vamos a ver. Si la Justicia la excarcela, que siga robando y metiéndose en las casas de la gente”, disparó. Para cerrar, la conductora le dejó un mensaje directo a Morena: “No la conozco ni quiero conocerla y que se olvide dónde vivo también, por las dudas”.
Con estas declaraciones, Barbieri no solo encendió la polémica mediática, sino que también expuso el nivel de intranquilidad que vive puertas adentro, dejando entrever que su conflicto con Morena Rial todavía está lejos de apagarse.