La alegría de Tato Algorta es indescriptible. Tras más de seis meses aislado en la casa de Gran Hermano, el uruguayo se alzó con el premio mayor y tuvo el honor de presenciar el apagón de las luces de la casa más famosa del país, dando cierre a una nueva edición del reality show de Telefe.
Con Luz Tito en el tercer puesto y Ulises Apóstolo en el segundo, la nueva edición del reality show de Telefe finalizó con un nuevo campeón y un sinnúmero de momentos inolvidables a lo largo de más de medio año.
Al momento de decir adiós a la casa que lo albergó durante todo ese tiempo, el «Big» dijo: «¿Sabés algo? Cada uno de los jugadores que pasaron por esta casa, en todos estos años, soñó con este momento: apagar las luces, ser el último en irse. Pero sólo lo logra uno y hoy te toca a vos. ¿Estás listo?».
Luego de los agradecimientos de Santiago, la casa comenzó a apagarse, dando por finalizada una de las ediciones más vibrantes de la competencia de convivencia. Antes de irse, Tato reflexionó: «Gracias por demostrarme que cuando uno quiere y va por lo que sueña las cosas se cumplen. Gracias por haberme hecho conocer a Luz, a Luchi y a Luci, y gracias por haberme dado la oportunidad de mi vida. Gente, salgan de la zona de confort, por favor, está ahí la felicidad».
«Buena vida, campeón, y hasta siempre. Salí que te espera una hermosa vida», concluyó Gran Hermano, tras lo cual el uruguayo dijo: «Me muero de ganas de ser muy feliz. Te quiero mucho, Big. Soy muy feliz. Gente, vayan por lo que sueñan, por lo que quieran, cáguense en la opinión de las demás, mientras no le hagan mal a nadie, sean fieles a sí mismos».
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