La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha denunciado este viernes la muerte de más de 225 trabajadores sanitarios en Líbano por los ataques ejecutados por el Ejército de Israel desde el 8 de octubre de 2023, fecha del estallido de las hostilidades con el partido-milicia chií Hezbolá al hilo de los asaltos perpetrados en la víspera por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) y otros grupos palestinos contra territorio israelí.
El representante del organismo en Líbano, Abdinasir Abubakar, ha indicado en una rueda de prensa que hasta la fecha se han confirmado 226 trabajadores sanitarios muertos y 199 heridos, antes de destacar que «casi el 70 por ciento» de los fallecidos han sido registrados desde el mes de septiembre, en medio del repunte de los ataques israelíes y el inicio de la invasión de Líbano, desatada el 1 de octubre.
Así, ha explicado que hasta la fecha se han registrado 127 ataques contra instalaciones sanitarias y ha detallado que el 47 por ciento de ellos se han saldado con la muerte de al menos un trabajador sanitario. «Es un porcentaje más alto que en cualquier otro conflicto», ha dicho, antes de subrayar que la media a nivel mundial en zonas de conflicto durante el último año ronda el 33 por ciento.
Abubakar ha destacado además el impacto «desproporcionado» del conflicto sobre el sistema sanitario de Líbano y ha manifestado que uno de cada diez hospitales han cerrado o han tenido que reducir sus funciones debido a las hostilidades. Por ello, ha ahondado en que la situación «no tiene precedentes, a todos los niveles», motivo por el que ha reiterado el llamamiento del organismo a «poner fin al sufrimiento de los civiles».
Apenas unas horas antes, al menos dos paramédicos murieron en un bombardeo de Israel contra un vehículo que circulaba por el sur del país, según ha denunciado el Gobierno de Líbano, que detalló que el coche pertenecía al Comité Sanitario Islámico, una asociación de rescatistas vinculada a Hezbolá.
Israel desató el 1 de octubre una nueva invasión de Líbano tras varias semanas de intensos bombardeos y ataques contra el país, incluida la explosión coordinada de miles de dispositivos de comunicación utilizados por el grupo libanés, después de más de once meses de combates con Hezbolá en la zona fronteriza. Líbano ha denunciado más de 3.500 muertos desde el estallido de las hostilidades.
El repunte de las hostilidades se enmarca en los enfrentamientos iniciados hace más de un año, después de que Hezbolá atacara territorio israelí tras los ataques perpetrados el 7 de octubre de 2023, que llevaron al Ejército de Israel a desatar una cruenta ofensiva contra la Franja de Gaza, donde han muerto ya más de 44.000 personas. Además, más de 790 palestinos han muerto en Cisjordania y Jerusalén Este.